El euro subió a un máximo de tres años frente al dólar este lunes, animado por un creciente optimismo económico en la zona euro y expectativas de que el Banco Central Europeo (BCE) ajuste su política monetaria.
El alza de la divisa europea frente a un dólar en general más débil fue especialmente destacado, ya que la mejora del panorama económico en la zona euro empujó a más inversores a reequilibrar sus carteras hacia la región.
Especuladores impulsaron las posiciones netas largas en el euro a un récord máximo en la semana hasta el 12 de enero, de acuerdo a los últimos datos de los futuros. Frente a una cesta de divisas, el euro está operando a su cota más elevada desde fines de 2014.
El dólar ha aumentado su debilidad según crece la confianza en los mercados en que la recuperación global superará el ritmo del crecimiento en Estados Unidos y hará que otros grandes bancos centrales -liderados por el BCE- pongan fin a sus políticas de alivio monetario más rápidamente de lo esperado.
Comparado con una cesta de monedas, el dólar cedió un 0,5 por ciento el lunes, su nivel más bajo desde 2015.
El euro subió casi un 0,6 por ciento, a 1,2265 dólares, tras tocar un máximo de casi 1,23 dólares, sumándose a las ganancias obtenidas la semana pasada después de que el BCE dijo que podría revisar su postura de comunicación a comienzos de 2018. Esta referencia incrementó las expectativas de que las autoridades se estén preparando para reducir su programa de estímulo.
La libra esterlina seguía alcanzando máximos no vistos desde que Reino Unido votó en junio de 2016 en favor de abandonar la Unión Europea. La divisa británica subió hasta 1,3819 dólares, animada por un reporte que indicó que dos estados miembros de la UE quieren que Londres se mantenga lo más cerca posible del grupo tras su salida.
Frente al yen, el dólar cayó a su mínimo desde mediados de septiembre, tras comentarios del jefe del Banco de Japón destacando la recuperación económica del país. El billete verde perdía un 0,4 por ciento, a 110,585 yenes.