Si a alguien que no ingresó al blanqueo le descubren activos, automáticamente hacen una presunción del 60%: 35% por incremento patrimonial, más 21% de IVA, más multas

El 10% de multa para quienes blanqueen desde $ 800.000 puede parecer caro para algunos. Sin embargo, si los «descubren», pueden perder el 60% de su patrimonio, además de quedar expuesto a una penal cambiaria y tributaria, con los gastos en abogados penalistas (suelen ser los más caros) que puede llegar a ocasionar.

Según explican los especialistas, si a alguien le descubren activos en el extranjero, automáticamente le hacen una presunción del 60%: 35% por el incremento patrimonial, más 21% de IVA, más un adicional por gastos no deducibles; además habría que sumarle las multas por defraudación. «Ergo, es un gil el que no blanquea», advierte Mariano Sardáns, CEO de FDI.

No obstante, el dinero que no corre el mismo riesgo es el que está en el «Colchón Bank»: ése es imposible que lo descubran, ya que la AFIP no tiene forma de saber cuánto guarda cada uno en cajas de seguridad, pero sí en cuentas bancarias.

El segmento que difícilmente adhiera al blanqueo es el de aquellos que hacen negocio con el efectivo (compran y venden mercadería en negro). En cambio, quienes tienen los dólares ociosos, se les «derrite» todos los años un 1% anual, que es la inflación anual en Estados Unidos: «A ellos les conviene toda la vida blanquear, pagar la multa y colocarlos en bonos, ya que con el Discount recuperan la multa en un año y medio con el flujo de fondos del bono. De ahí en más, tienen renta pura, libre de impuestos, por varios años», aconseja Sardáns.

Desde la primera línea del Gobierno están muy confiados: aseguran que se superarán los u$s 80.000 millones y los más entusiastas se animan a hablar también de u$s 100.000 millones, aunque no son estimaciones que están dispuestos a difundir. Mejor hablar de u$s 30.000 millones y luego asegurar que se triplicó lo esperado.

En rigor, los principales bancos de inversión internacionales están muy activos reuniéndose con sus clientes por este tema y la cifra que manejan en el exterior es que se blanquearán entre u$s 50.000 y u$s 60.000 millones.

Pero mucha gente que quería blanquear se quedará afuera, por el nivel de prohibición que pusieron, ya que no pueden entrar no sólo los ministros, sino tampoco secretarios, subsecretarios ni directores del Estado nacional, provincial, ni municipal, aunque no sean funcionarios full time, y tengan su estudio jurídico. Aunque quieran (y muchos quieren), no podrán hacerlo porque la ley se los impide, por lo que unos cuantos se quedarán afuera. Al Gobierno le hubiera gustado que el blanqueo fuera más liberal, pero finalmente no les quedó otra que poner límites para la participación de funcionarios.

Lo cierto es que Uruguay seguirá siendo una plaza atractiva del dinero negro y los espacios para tenerlo seguirán existiendo «porque lo necesita el mundo, no sólo nosotros», dicen en el ambiente. «Por algo Londres es el reino de los paraísos fiscales y eso no va a cambiar. Gran Bretaña, con las Islas Vírgenes a la cabeza, es un jugador internacional muy fuerte, ya que los niveles de controles son muy bajos, por algo los grandes magnates rusos y árabes van ahí, porque los reciben de brazos abiertos: eso no cambiará», se sinceran.