Es para los buitres y para el resto de los acreedores que no entraron a los canjes, lo que permitiría cerrar la reestructuración de la deuda. Reclaman un total de u$s 23.000 millones

Caída la cláusula RUFO, que impedía al país mejorar la oferta a tenedores de bonos defaulteados en 2001 que no entraron a los canjes de 2005 y 2010, el ministro de Economía, Axel Kicillof, reveló la propuesta local para darle un cierre al capítulo del default, una historia que empezó a escribirse en los turbulentos meses de 2001.

En una entrevista exclusiva al periodista Roberto Navarro, director del portal El Destape, Kicillof explicó que la oferta del Gobierno «es la misma de 2010, en que ofrecimos lo mismo de 2005. Los discount, con una quita del 65%» anunció y explicó que ofrece a cambio «un discount como si hubiera entrado al canje en 2005, con intereses capitalizados durante todo el periodo y estamos dispuestos a ofrecer también el cupón PBI desde el primer canje, capitalizado. Puede dar hasta 100% del valor nominal», aseguró y graficó que «el que tiene u$s 400 millones en bonos cobra u$s 400 millones. Son u$s 6.500 millones de dólares en total para el 7,4% que no entró al canje».

Consultado sobre el reclamo total de esa facción que no aceptó ninguna de las dos reestructuraciones de deuda que propuso la Argentina, Kicillof explicó que «hay bonos con pari passu y sin pari passu; con fallo y sin fallo. Algunos devengan intereses judiciales, que son muy bajos, y otros aún con el interés del bono original. Todavía hay reclamos en el juzgado de Griesa muy distintos», dijo el ministro, quien estimó que «el total máximo para cancelar el 7,4 % que no entró al canje en las condiciones de Griesa es de u$s 23.000 millones. Y el tema es que para acordar hay que cerrar con todos. Porque «si nos queda un solo bono susceptible de ser tomado por Griesa pueden pararnos los cobros igual».

La quita es importante, como lo fueron las dos anteriores. sin embargo, Kicillof recordó que, entonces, «el 93% aceptó porque no podía cobrar de otra manera. Y ahora tampoco», y alertó que «solo el 20% de los bonos tiene legislación Nueva York. El 50% es Argentina y el 30%, europea». Mientras que el bloqueo de Griesa sólo abarca al 20% de Nueva York. Kicillof opinó que sólo por ahora también implica al 30% europeo, pero alertó que «ellos tienen un fallo que está en disputa y ese es un punto central. Es un fallo con agujeros, con consecuencias inciertas».

Respecto del 50% restante, indicó que «los pagos con ley argentina se están liberando. Y ¿qué pasa si liberan los europeos en la justicia británica?», se preguntó. «Todo es dinámico. Financieramente también el tiempo jugó a favor nuestro. El mercado toma nuestros bonos al precio anterior a la decisión de la Corte. No a precio de default», analizó.

Respecto del acceso al financiamiento por parte de la Argentina, Kicillof aseguró que la tasa del mercado «es la misma. No hubo pedido de aceleración. No pasó nada», sentenció.

«Tampoco es tan lineal como que para el país esto significa una catástrofe ni que solucionado esto cambia completamente el cuadro. Depende de la política del Gobierno. Nosotros vinimos a desendeudar», aseguró y agregó que está haciendo «una oferta. Quizá las circunstancias hagan que mañana les convenga y acepten».

En cuanto a la economía de 2015, anunció que «el problema del año no es de reservas; es si es necesario salir al mercado y a qué tasas estamos dispuestos a salir. En Argentina se tomó plata al 15%. Nosotros no estamos desesperados. Pero si queremos tomar deuda, podemos», sentenció.