Por la inflación, el Banco Central evalúa emitir billetes de $20.000 y $50.000. La novedad ya fue anticipada por el titular de la autoridad monetaria a los bancos. Forma parte del «plan de estabilización» implementado por Javier Milei.

En medio de la inflación que llegó al 12,8% en noviembre pasado y alcanzó una variación interanual del 160,9%, el Banco Central analiza crear billetes de $20.000 y $50.000. La medida se fundamenta como parte del «plan de estabilización» implementado por el gobierno de Javier Milei.

El presidente del BCRA, Santiago Bausili, anticipó días atrás esta decisión a las autoridades de los bancos. En la actualidad, el billete de máxima nominación es el de $2.000, que en la práctica equivale a dos dólares en el mercado paralelo.

Las especificaciones técnicas ya están listas y, de acuerdo con el anticipo del Panorama Empresario del viernes pasado, se retomaron las tareas que, a escondidas, Miguel Ángel Pesce había realizado en los últimos meses. El antecesor de Bausili ya los había encargado a raíz de las fuertes críticas de los bancos por el costo que significa el guardado y la logística de tener billetes de tan bajo valor.

Según trascendidos, en un principio se había pensado en billetes de 5.000 y 10.000 pesos. Sin embargo, la inflación se mantiene en niveles altos, por lo que se inclinaron por otra posibilidad: billetes de mayor nominación para no perderle pisada a la escalada de precios.

Actualmente, el billete de $2.000 es el de mayor nominación en la Argentina.

Cuándo empezarían a circular los billetes de $20.000 y $50.000

Bausili tiene la lista la confección de los nueves billetes, que entrarían en circulación desde marzo próximo. Claro que, en medio de las planificaciones, hay algunas dificultades. Por ejemplo, la Casa de la Moneda aún no tiene presidente designado. Su último titular, Ángel Elettore, presentó su renuncia.

El organismo está en manos de las dos integrantes que completan su directorio y, de acuerdo con la ley, una representa al BCRA, Cristina Tchintian, y otra al ministerio de Defensa, Marina Pecar. Ambas fueron designadas oportunamente por Miguel Pesce y Jorge Taiana, respectivamente.

Toda la producción de Casa de la Moneda está volcada a los papeles de 1.000 y 2.000 pesos, y a la mayor velocidad posible. Otra posibilidad es traerlos del exterior mediante un proceso que no sólo demora, sino que además tiene un elevado costo. Y como dijo Milei en varias oportunidades, en las arcas del Estado “no hay plata”.

A eso se suma que están pendientes de pago los billetes ya encargados al exterior. La Casa de la Moneda adeuda U$S11,18 millones a su par brasileña, más de 12 millones de euros a la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre de España y casi U$S7 millones a China Banknote Printing and Minting Corporation para normalizar la provisión de billetes e insumos.