El tipo de cambio atrasado invita a participar de programas de pasajeros frecuentes para poder viajar enel futuro; los tips

De la mano del atraso cambiario y el fuerte crecimiento del gasto a través de tarjetas de crédito, en la maraña de tipo de cambio oficial, blue, ahorro, tarjeta, bolsa y linked, el «dólar milla» también tiene su explosión con un crecimiento en la cantidad de canjes de puntos por pasajes que llega al 40% , con más de 300.000 tickets emitidos en el último año sólo entre Aerolíneas Argentinas y Lan.

Los «milleros», como se llama a los socios de los programas de fidelización de las aerolíneas, acumulan puntos cuando vuelan, pero, sobre todo, incrementaron la posibilidad de adicionar puntos con el consumo a través de bancos, cadenas de supermercados, hoteles o rentadoras de autos asociados al mismo plan. Como un dólar gastado es equivalente a una milla, en tiempos de atraso cambiario alcanzar los puntos para un viaje es más accesible.

En Lanpass, el 60% de los puntos acumulados proviene de consumos no aéreos y el acuerdo con el BBVA Francés genera el 40% de esos kilómetros que pueden canjearse por vuelos. En Aerolíneas, el 38% proviene de convenios con bancos (28%) y otros socios, y el 56% es por vuelos realizados en la compañía.

«Cuando la percepción es que habrá una devaluación aumentan los canjes para viajar ya, porque no saben si podrán hacerlo el año próximo, pero nadie deja la cuenta de kilómetros en cero, todos guardan parte de los puntos», explica Daniel Zelmann, gerente de fidelización de Lan. Así, quien tiene puntos para cuatro tickets a Brasil canjea dos y paga los otros dos, de manera tal que el año próximo tiene parte del viaje pago, porque las millas no se devalúan.

Un cliente que tiene 40.000 puntos canjeables por un pasaje a los Estados Unidos, hoy tiene amplias posibilidades de pagar por ese pasaje unos $ 11.000 en cuotas sin interés. En cambio, si este año usa las millas y en 2016 quiere comprar un vuelo al mismo destino, nadie apuesta cuánto costará el viaje, que se moverá al compás de lo que suceda con el dólar.

En este contexto, el programas de Citi con American Airlines y el de American Express (que permite transferir millas a 11 aerolíneas) dan una ventaja, al no tener vencimiento los puntos. «American Express sostuvo siempre la condición en el tiempo de que un dólar es un punto y no tiene vencimiento; eso hace que la posibilidad de acumular esté atada a la fortaleza o debilidad del dólar», explica Marcela Marchesi, directora de Marketing para el Cono Sur de Amex. Eso también permite que no sea necesario tener un mínimo de consumo para poder usar el programa, porque con el paso del tiempo, todos los usuarios pueden llegar a un canje.

Para el sistema financiero, los programas de millas son los más costosos, pero también los más redituables. «Es un socio que gasta más, tiene más fidelidad con el plástico y mira más allá de los descuentos o las promociones puntuales; no cancela el producto y si ya hizo un canje se vuelve aún más fiel», cuenta Marchesi.

El Banco Hipotecario es el mayor emisor de tarjetas con acuerdo de millaje con Aerolíneas, con 115.000 cuentas. Esos clientes gastan un 30% más que el promedio del banco y tienen un 60% más de débitos automáticos, según la entidad.

En tiempos de muchas tarjetas en la billetera, Zelmann destaca que el valor agregado de los programas es muy alto para las marcas asociadas. En Lanpass le dicen «kilómetro-adicto» a los pasajeros que aplican todas las estrategias para acumular más rápidamente y detectan clientes que concentran todos sus consumos con la tarjeta de crédito asociada, en el supermercado adherido y vuelan en la aerolínea en cuestión.

Como la promesa de un vuelo «gratis» es muy tentadora y aspiracional, antes de embarcarse en un programa de viajeros hay que ser consciente de si el nivel de gasto que uno realiza le permite llegar a los puntos necesarios para canjear un ticket en un plazo razonable. Si no, el impacto de los gastos fijos de la tarjeta de crédito o de los cargos que hay que pagar cuando se toma un pasaje por puntos consumirá una parte importante del beneficio. Un viaje a Brasil cuesta 14.000 puntos, que requerirían gastar unos $ 135.000 al tipo de cambio actual, por lo tanto hay que consumir más de $ 3700 mensuales durante tres años para conseguir un boleto gratuito.

Puestos a sumar millas, las mejores estrategias son:

  • Tarjetas. Concentrar en un plástico principal todos los gastos, porque si se suma en tres programas de lealtad distintos ninguno tendrá lo suficiente para canjear. El resto de los plásticos se usa sólo cuando hay un descuento puntual.
  • Aerolíneas. Los que viajan por trabajo deben buscar el plástico que sume con la aerolínea que contratan habitualmente, para acumular por vuelos y por gastos.
  • Puntos. Si el viaje es en pareja o familia, es mejor canjear por millas el ticket del acompañante y comprar el del titular de la cuenta. Así sumará por el gasto y también por el vuelo, ya que el pasaje promocional no acumula puntos.
  • Promociones. Los bancos estimulan la adhesión de débitos automáticos o la contratación de productos con el regalo de puntos que ayudan a llegar más rápido al premio. También las aerolíneas suelen ofrecer dos o tres veces al año la posibilidad de comprar millas con descuento para completar los puntos para un viaje o acumularse.
  • Gastos fijos. Los consumos repetidos e imprescindibles son perfectos para poner en débito automático y acumular, especialmente si son gastos altos como el colegio privado, la universidad o una prepaga.
  • Asociados. Tener en cuenta los consumos habituales (supermercado, nafta, celular, farmacia) que pueden sumar puntos para un plan de millas porque el comercio o el prestador de servicios está asociado. Si la compra se paga con una tarjeta de crédito que sume al mismo programa, el puntaje se duplica.

Con las millas acumuladas, sólo falta elegir el destino. Para el que puede sumar pocos puntos, el plan de la línea estatal es el más conveniente por la cantidad de destinos de cabotaje que ofrece y que empiezan en unos 12.000 puntos. El de Lan tiene la oferta más amplia a los Estados Unidos y Brasil, por la fusión con la brasileña Tam. Mientras que Amex, al tener 11 aerolíneas disponibles, ofrece las opciones más atractivas para volar por puntos a Europa y México, y Citi para volar a Estados Unidos con American Airlines.

Inversión de alto vuelo

Las claves para maximizar las millas conseguidas y saber cómo usarlas

US$ 1

Atraso cambiario

Equivale a una milla. En tiempos de atraso cambiario, alcanzar los puntos para un viaje es más accesible

40.000

Dólar futuro

Quien tenga esa cantidad de puntos para un pasaje a los Estados Unidos, también puede pagar unos $ 11.000 en cuotas sin interés. Pero si este año usa las millas y en 2016 quiere comprar un vuelo al mismo destino, nadie sabe cuánto costará el viaje, que se moverá al ritmo del dólar

14.000

Gastar para sumar

Son los puntos que cuesta un viaje a Brasil, que requerirían gastar unos $ 135.000 al tipo de cambio actual, por lo tanto hay que consumir más de $ 3700 mensuales durante tres años para conseguir un ticket gratuito

60%

Es el porcentaje de los puntos Lanpass que proceden del consumo no aéreo. En Aerolíneas es del 38%

11

Es la cantidad de aerolíneas con las que tiene convenio Amex