Había quedado dólar puré diferido de la semana pasada por compras de dólar ahorro, que ascienden a u$s 408 millones en agosto. Ventas forzadas para poder pagar la tarjeta
«Había quedado mucho dólar puré diferido de la semana pasada, cuando muy pocos habían revendidio lo comprado por tenencia». Esta es la explicación que dan los cueveros de por qué el blue retrocedió 10 centavos a $ 14,83, en una rueda donde se operó a $ 14,90 luego de caer a $ 14,80.
Al ver el resultado de las PASO, muchos descargaron las compras que habían hecho en el dólar ahorro, cuyas ventas trepan a u$s 408 millones en lo que va de agosto (ayer fue el día de menor venta, sólo u$s 26,7 millones). Como ayer a muchos mildoristas (a quienes la AFIP les permite cambiar u$s 1.000) les vencía el resumen de la tarjeta de crédito, no les quedó otra que salir a revender, ya que la cifra representa el 30% del salario. Aseguran en las mesas que puré hay todos los días, pero los que tienen espaldas para aguantar no revenden los billetes a principios de mes, sino más adelante, para ganarse unos pesos más, con la expectativa de una suba del informal. «Yo tengo clientes que son responsables inscriptos, que declaran $ 300.000 mensuales, compran el máximo permitido de u$s 2.000 y aún así te liquidan durante el mes. Sólo ahorra el 10% que lo deposita y quizás otro 10% en el colchón, pero el resto, todos liquidan. El promedio de asalariados que compra ganan entre $ 30.000 y $ 35.000, y adquieren u$s 800. No pueden retener meses, y el lunes post PASO era el momento», detallan los pitufos, como se denomina en la jerga a los dueños de las cuevas.
Mariano Sardáns, de FDI, coincide en que la baja del blue está asociada a la operatoria del dólar ahorro y su posterior venta al valor del paralelo: «Evidentemente las personas que lo hacen tienen como objetivo obtener un diferencial. Hoy seguramente se han desprendido de los dólares que adquirieron la semana pasada y eso es lo que mueve el mercado».
Para Martín Polo, de Analytica, la baja del billete obedeció a un combo de buenas noticias: «Los mercados de afuera estuvieron con subas generalizadas que le dieron impulso a los commodities, también se estabilizó el real y subió la soja. Lo más importante fue que la Corte le pidió a Griesa que revise un fallo contra Argentina».
Polo estima que el mercado seguirá tensionado y el blue tenderá a subir, «dado que se vienen meses con mucha emisión de pesos para financiar al Tesoro, al tiempo que la oferta de divisas ingresa en la peor etapa del año».
Gustavo Perilli, de AMF Economía, está viendo un Scioli más conciliador, un esperanzador rebote de Macri y a una provincia de Buenos Aires menos kirchnerista.
«El mensaje conciliador de los tres candidatos abre una moderada esperanza al mercado», señala Alejandro Banzas, de Reporte Económico.
Rafael Di Giorno, de Proficio, remarca el discurso moderado de Scioli que apunta a fomentar el ingreso de divisas al país: «La señal fue valorada, ya que hoy falta que entren dólares más que seguir poniendo trabas a la salida de divisas. De paso, vino bien el fallo de la Corte limitando la cantidad de acreedores que podían reclamar según el fallo de Griesa».
«El contexto además ayudó mucho, con el Dow volando y ADRs brasileños subiendo muy fuerte», observa Juan Manuel Palacio, agente productor del Merval.
Desde la óptica de Pedro Rabasa, de Empiria, «el mercado tomó con optimismo el resultado electoral, como una señal de que el ballottage es muy probable».
Belisario Alvarez de Toledo, de J&B Analytics, advierte que tanto para el blue como para el dólar Bolsa se siguen sumando soportes al alza.