En las ocho primeras jornadas hábiles de este mes, se vendieron u$s 21,5 millones de dólar turismo, lo que representa el doble de los u$s 11 millones que se habían comercializado el mes pasado, cuando el efecto vacaciones no era tan fuerte.
La divisa para viajar cotiza a $ 11,61 (oficial de $ 8,60 más el 35% de retenciones), lo que marca un atractivo al ser $ 2 menor que el valor del blue.
Lo que hacen muchos, entonces, es pedir para turismo, aunque en el exterior se dediquen al famoso arte del tarjeteo. El objetivo es que les sobre moneda extranjera, para cambiarla por dólares antes de regresar al país. Una vez en la Argentina, lo cambian por pesos en el mercado paralelo y se ganan unos dinerillos extras.
Hoy la moneda que más se demanda es el real, aunque comentan en los bancos que cayó entre 30 y 40% la cantidad de compradores con respecto a enero del año pasado, cuando la gente e iba por dos semanas al extranjero, mientras ahora muchos se fueron a la costa argentina aprovechando los feriados entre Navidad y Año Nuevo.
De hecho, Fabricio Di Giambattista, presidente de la Asociación Argentina de Agencias de Viajes y Turismo, señaló que, hasta noviembre, la caída en paquetes turísticos al extranjero es del 37% con respecto al año pasado, según información que se desprende de la facturación de ventas aéreas al extranjero a través de agencias de viajes.
Luego del real, la segunda moneda más solicitada es el peso chileno, que tiene mucha demanda en la población de Cuyo, en especial por la cantidad de mendocinos que cruzan la cordillera para veranear en el vecino país. En tercer lugar viene el dólar por los que se van a Miami y en cuarto puesto el peso uruguayo. Para los países limítrofes, la AFIP otorga la moneda de esa nación, y da euros para los países de esa zona. Para el resto, se puede elegir la moneda. Pero si un individuo vuelve al país con uruguayos, no los puede cambiar aquí por dólares en una casa de cambios, sino que debe cambiarlos por pesos al valor oficial. Por eso, es que muchos los cambian por divisas antes de tocar tierra nacional.
Más dólar ahorro
Las ventas por dólar ahorro crecieron 14% en las primeras ocho ruedas de este mes comparado con diciembre pasado. Hasta ahora, se comercializaron u$s 268 millones, contra u$s 236 millones del mes pasado.
Buena parte de este monto va a parar a las cuevas de la City que, de este modo, se abastecen de billetes verdes. Para el gobierno, es una estrategia de sacrificar reservas del Banco Central en pos de mantener el precio del blue.
Desde la liberación parcial del cepo, se vendieron u$s 3.233 millones en concepto de tenencia a 5 millones de contribuyentes, lo que arroja un promedio de u$s 650 per cápita.
Por turismo, en tanto, se entregaron u$s 512 millones a 458.710 individuos, lo que marca un promedio de casi u$s 1.000 a cada uno. Por viajes suelen dar alrededor de u$s 100 por día por persona.
En este sentido, y bajo la etiqueta de la «bicicleta financiera», el «puré», como se denomina en la jerga a comprar en el mercado formal y venderlo en el informal, es una modalidad que sigue ganando adeptos, que compran a $ 10,32 para revenderlo en el acto a $ 13,50. El máximo autorizado por la AFIP son u$s 2.000 (para los que ganan más de $ 100.000). Por lo tanto, invierten $ 20.640 para adquirir dólar ahorro. Luego van a una cueva y reciben por esos u$s 2.000 unos $ 27.000. Una ganancia del 30% en un abrir y cerrar de ojos tienta a más de uno.
Aunque, en rigor de verdad, la rentabilidad es todavía superior, porque luego esa persona descuenta el 20% por ganancias, por lo que termina comprando un dólar a $ 8,60 para revenderlo a $ 13,50, lo que marca una utilidad del 57%.